Un estudio llevado a cabo por un equipo argentino en colaboración con Maria Ángeles Arévalo, jefa de grupo del CIBERFES en el Instituto Cajal del CSIC, concluye que la administración del factor de crecimiento semejante a la insulina (IGF1), mediante terapia génica, podría provocar el retraso de la senescencia reproductiva en ratas hembra.
“En este trabajo, se ha estudiado el efecto de la terapia génica con IGF1 sobre la secreción de GnRH,ykisspeptina por las neuronas hipotalámicas y sobre las células de microglía, que median el proceso inflamatorio relacionado con el envejecimiento” explica la investigadora.
El proceso de envejecimiento es el resultado de la progresiva pérdida de la homeostasis y de la capacidad funcional de todo el organismo, incluido el sistema nervioso central, donde el hipotálamo juega un papel principal en la regulación de los mecanismos de envejecimiento. Las consecuencias del envejecimiento incluyen un entorno proinflamatorio crónico en el hipotálamo que promueve una menor secreción de la hormona GnRH y altera la funcionalidad de las neuronas productoras de kisspeptina.
Los resultados son fruto de la colaboración con CONICET y la Universidad Nacional de La Plata, en Argentina, y han contado con la participación, asimismo, de la Universidad Autónoma de Madrid.
Artículo de referencia
. IGF1 gene therapy in middle-aged female rats delays reproductive senescence through its effects on hypothalamic GnRH and kisspeptin neurons. Aging (Albany NY). 2022 Nov 1; 14:8615-8632.